El Banco de España recibió en 2020, el año de la pandemia, más de 21.300 reclamaciones de consumidores contra los bancos que operan en el país. Esta cifra supone un incremento del 45,6% respecto a los datos de 2019, según figura en un informe del organismo supervisor publicado este martes. Es un dato también superior al del año 2018, pero todavía queda por debajo de los años de más conflictividad por ciertas malas prácticas en la banca, como fueron las cláusulas suelo (2013 y 2014) o los gastos hipotecarios (2017).
El documento destaca que casi dos terceras partes de las reclamaciones recibidas por el Banco de España durante el pasado curso obedecen a las hipotecas, las tarjetas y las cuentas corrientes. El organismo recuerda que su buzón de reclamaciones solo puede abordar aquellas protestas que ya se han trasladado previamente ante el servicio de atención al cliente del propio banco. Estas oficinas recibieron en total durante el pasado año más de 820.000 reclamaciones, un 53% más que un año antes.